Antonia Orellana, muy cercana al presidente Boric, rechazó esta práctica al hilo del caso de Ana Obregón: “No prestamos el cuerpo. Es indispensable erradicar la violencia en todas sus formas.

La titular del ministerio de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, junto al presidente Gabriel Boric.
La titular del ministerio de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, junto al presidente Gabriel Boric.MINMUJERYEG (RR SS)

 

La ministra de la Mujer y Equidad de Género de Chile, Antonia Orellana, muy cercana al presidente Gabriel Boric, se ha sumado a las críticas por los vientres de alquiler a propósito del caso de la presentadora española Ana Obregón, que a sus 68 años se acogió a esta práctica en Florida, Estados Unidos, donde, a diferencia de España, es legal. A través de un hilo publicado en su cuenta de Twitter, donde hizo una alusión directa a Obregón al mostrar la portada de la revista ¡Hola! que reveló la historia, la ministra chilena rechazó la gestación subrogada. “No prestamos el cuerpo”, afirmó antes de añadir que “es indispensable erradicar la violencia en todas sus formas, incluidas las que se abren hoy”.

Orellana milita en el mismo partido que el presidente Boric, Convergencia Social, que forma parte del Frente Amplio (FA), una agrupación que tiene una gran sintonía con Podemos. A fines de enero, por ejemplo, la pareja del mandatario, Irina Karamanos, participó en el Encuentro Internacional Feminista que organizó el Ministerio de Igualdad de España, que encabeza la ministra Irene Montero. En marzo de 2022, cuando Boric asumió como presidente, la ministra española fue parte de la comitiva del Gobierno español que llegó a Chile a saludar al nuevo mandatario. En noviembre pasado, cuando Montero fue atacada por Vox en el Congreso, Boric se solidarizó: “Desde Latinoamérica todo mi apoyo a Irene Montero. Compañera incansable en la lucha por mayor justicia e igualdad que hoy enfrenta una nueva asonada de violencia política de la extrema derecha. No estás sola Irene. Un abrazo transoceánico”.

Las declaraciones de la ministra de la Mujer de Chile ocurren, precisamente, un día después de que la ministra Montero se refiriera al caso de Obregón y calificara el contratar un viene de alquiler como una “forma de violencia contra las mujeres”.

En sus mensajes a través de Twitter, la ministra chilena de 33 años recordó su exposición en la 67º versión de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW67), en Nueva York, el 9 y 10 de marzo pasado, donde se abordó la gestación subrogada con fines comerciales. “A propósito de la polémica por este caso de una mujer que va a EE UU (porque en España es ilegal) a comprar una guagua [bebé], en marzo viajamos a la #CSW67 a advertir sobre los peligros de la gestación subrogada para fines comerciales”, escribió Orellana. “La desregulación habilita la explotación sexual de mujeres, la trata y la venta de niños/as. El tema de la #CSW67 fue la tecnología y mi posición fue clara: ‘no prestamos el cuerpo’ y es indispensable erradicar la violencia en todas sus formas, incluidas las que se abren hoy”, agregó.

Además, Orellana dijo que “con la dolorosa historia de nuestro país respecto a la violencia contra mujeres rurales, empobrecidas o enfrentando violencia a quienes se engañó para traficar niños y niñas, no podemos dejar de advertir desde el sur global el peligro de estas prácticas”.

No hay regulación en Chile

Camila Maturana, directora de Humanas, un centro especializado en derechos humanos y justicia de género, señala que en Chile no existe regulación respecto a la gestación subrogada y que es un debate que la sociedad chilena tiene pendiente.

“En la experiencia internacional hay países que prohíben esta práctica, incluso, sancionándola penalmente. Otros la regulan con fines altruistas, excluyendo el pago o lucro, mientras que hay países que la permiten. En estos casos, se ha generado un mercado que favorece que personas de distintos países que, teniendo el dinero, pueden cumplir su deseo de maternidad o paternidad. Sin embargo, la preocupación principal frente a ello radica en la protección de las mujeres en situación de vulnerabilidad que las pueda exponer a situaciones de explotación”, explica la abogada.

Maturana agrega que, en el caso de que se iniciara cualquier discusión al respecto, debe quedar resuelto si una legislación es capaz de proteger el interés superior de los niños, niñas y adolescentes “y resguardar la autonomía de la decisión de todas las mujeres, especialmente las mujeres pobres, atendida la historia lamentable de nuestro país”. “Tanto durante la dictadura cívico militar (1973-1990) como posterior a ella, han sido numerosos los casos de adopciones ilegales que, en realidad, fueron situaciones de robo tráfico de niños”, asegura la especialista de Humanas.

La ministra Orellana tiene una reconocida trayectoria en el feminismo. El Gobierno de Boric, a su vez, ha sido el primero en Chile que se ha declarado abiertamente como feminista y, entre otros símbolos, tiene un Gabinete paritario, de 12 mujeres y 12 hombres. La mujer del presidente, Karamanos, asumió en un comienzo el cargo de Primera Dama, pero luego transformó ese espacio y dejó de cumplir labores en La Moneda. A mediados de marzo, sin embargo, la portavoz del Gobierno, Camila Vallejo, aseguró: “Es muy pretencioso de nuestra parte decir que somos un Gobierno feminista (…) Es una aspiración”.

Noticia Publicada en El País de España