La joven de 23 años fue asesinada hace un año por su pareja, y aunque en el juicio la defensa del imputado intentó desestimar la convivencia para descartar el femicidio, el Tribunal Oral de Melipilla lo declaró culpable y decretó para él la pena de presidio perpetuo calificado. A pesar de la condena la dificultad de tipificar estos casos sigue vigente, pues la ley establece que este delito solo se remite a relaciones oficiales y no a todos los casos de violencia contra las mujeres.

Por Andrea Bustos, Radio Universidad de Chile 

Isidora