Este primer encuentro con la ciudadanía de las mujeres busca abrir el debate sobre una Nueva Constitución y el próximo proceso constituyente, incorporando y reconociendo los derechos colectivos de las mujeres, en base a su diferencia sexual y de género.

El Cabildo será un primer encuentro abierto de mujeres, en las que ellas definirán cuáles son los cambios constitucionales que mejor representarán sus demandas en materia de reconocimiento derechos. El Primer Cabildo de Mujeres por una Nueva Constitución está siendo organizado por Corporación Humanas, en conjunto con la Municipalidad de Santiago, en el marco del programa conjunto entre la Unión Europea y ONU Mujeres para fortalecer a las organizaciones de la sociedad civil que trabajan por la equidad de género.

Esta acción ciudadana congregó a un centenar de mujeres provenientes de una multiplicidad de organizaciones: desde organizaciones sociales y de base que trabajan en el ámbito local y comunal, a agrupaciones de mujeres y feministas que proyectan su trabajo en el nivel nacional y regional. Carolina Tohá alcaldesa de la Municipalidad de Santiago dio la bienvenida a este Primer Cabildo expresando que Chile ya está preparado para un cambio donde “todos y todas se sientan reconocidas”.

Para Carolina Carrera presidenta de Corporación Humanas una nueva Constitución es un acuerdo sobre el país y la sociedad en que se quiere vivir: “yo quiero una sociedad en que las mujeres vivamos libres de violencia”, dijo recordando las ocho mujeres que han sido asesinadas en la última semana. Agregó que una nueva Constitución deberá reconocer la existencia de una “ciudadanía con género, que asegure la igualdad real entre mujeres y hombres y la no discriminación en lo público y lo privado; mujeres sujetas de derecho sobre nuestra vida sexual y reproductiva”.
“La mitad de la ciudadanía que actúa y opina, y que demanda hoy mayor transparencia y representatividad del sistema político, son mujeres. Mientras los estados no tomen medidas deliberadas y concretas para garantizar una mayor presencia de mujeres en las decisiones políticas y económicas de los países, será difícil remontar el tan lento avance en lograr mínimos de equidad y justicia social”, expresó Rafael Dochao embajador de la Unión Europea en Chile.
María Inés Salamanca, coordinadora de Programa de ONU Mujeres en Chile, destacó las revisiones que el organismo internacional ha realizado de las constituciones en 195 países, señalado el impacto del texto legal en la vida de las mujeres. “Con el tiempo, hemos evidenciado que las reformas y procesos constituyentes son oportunidades para que los países integren o amplíen las disposiciones sobre la igualdad de género”.

Las conclusiones de este Cabildo de Mujeres serán parte de las demandas que se deberían incluir en el debate sobre el proceso constituyente anunciado para septiembre por la presidenta Michelle Bachelet en la reciente cuenta pública.

Experiencia comparada
En Ecuador, las mujeres incorporaron en la nueva Constitución el reconocimiento de la economía del cuidado, la seguridad social para las mujeres que realizan trabajo doméstico no remunerado, el respeto de los derechos colectivos de los pueblos originarios, y se precautelan los derechos de las mujeres indígenas. A su vez, establece la igualdad entre hombres y mujeres, constituyéndose así la igualdad y la no discriminación por razón de sexo en principios fundantes de la Constitución.

En el caso de Colombia, también incorporó en la Constitución principios respecto de la igualdad de género y derechos de las mujeres, se reconocieron los derechos sexuales y reproductivos, la reproducción humana se estableció como un derecho y una responsabilidad.

Por último, en el caso de Bolivia, la nueva Constitución incorpora el principio de equidad social y de género, la democratización y reconocimiento del valor del trabajo doméstico, la acción positiva, la igualdad y no discriminación, los derechos sexuales y reproductivos, el derecho a una vida libre de violencia, el principio de la paridad, uso de lenguaje no sexista.